La economía sumergida puede suponer hasta el 20% del PIB provincial
Noticia extraída del IDEAL DIGITAL 13/06/06
J. E. P./JAÉN
Uno de cada cinco euros que se mueven en la provincia de Jaén son 'negros'. El dato lo dio en septiembre de 2004 el secretario general de UGT en Andalucía, Manuel Pastrana, -con muchas prevenciones pues sobre la economía sumergida, como su propio nombre indica, no hay cifras oficiales- con los informes del Consejo Económico y Social de Andalucía en la mano. Nadie los rebatió, ni desde entonces las magnitudes macroeconómicas de la provincia han variado tanto como adivinar un cambio sustancial.
Todos los estudios económicos sobre la materia señalaban a la agricultura como el principal foco de actividades y transacciones económicas fuera del control del Fisco y la Seguridad Social. Pero Pastrana añadió que el dinero negro circula de forma generalizada en la construcción, las fábricas de textil y los servicios domésticos. Andújar, Jódar, Úbeda, Martos y La Carolina eran las localidades que el Consejo Económico y Social señalaba como las más afectadas.
Con niveles «altos» estaban Jaén, Linares, Orcera, Canena, Rus, Cazorla, Porcuna, Alcalá la Real y Santisteban del Puerto. Pastrana distinguió sin embargo entre los trabajadores que se benefician por la economía sumergida y los que la padecen por estar impuesta en las políticas de externalización de empresas grandes.
Lo cierto es que en operaciones de cierto nivel (como comprar una finca o una vivienda) el tema del dinero negro surge casi siempre en algún momento del trato.
El Observatorio de la Vivienda estima en la provincia de Jaén se escritura entre un 20 y 30% por debajo del precio real de los inmuebles, burlando así al Estado -si se trata de una vivienda nueva, pues se le escatima en el IVA- o a la Junta de Andalucía, que deja de percibir lo que le corresponde por el impuesto de transmisiones patrimoniales.
En el campo, los agricultores se suelen atener a tablas de precios que acepta Hacienda según el tipo de cultivos, bastante desfasadas (a la baja) respecto a los precios reales. El resto, en 'negro'.
Pagarlo todo -tierras o pisos- con dinero limpio procedente de la caja A encarece notablemente la operación. Uno de los inconvenientes con los que se enfrentan los que viven de una nómina.
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