Explosión de júbilo en la salida de la Virgen de Alharilla
Difícil de explicar con palabras lo se vivió ayer en la aldea de Alharilla cuando la Patrona de Porcuna, la Santísima Virgen de Alharilla, salía de su ermita a hombros de sus infatigable anderos, que como siempre tuvieron que guardar sitio en las puertas del santuario durante toda la noche y madrugada.
A las cinco de la tarde, como manda la tradición, una salva de cohetes y repique harmonioso de la campana de la iglesia anunciaba que la Reina de la Campiña estaba ya con sus hijos para realizar la ancestral procesión por la aldea. Un reguero de serpentinas y el júbilo y fervor de la multitud de fieles y romeros inundó la salida de la Patrona de Porcuna, la Santísima Virgen de Alharilla. Las palmas y los “vivas” a la Virgen se entremezclaban con las lágrimas y la fe de sus romeros, al verla de nuevo radiante en el llano un año más.
El largo rosario del cortejo procesional lo encabezaban, con sus banderas al viento, las cofradías de los pueblos vecinos de Escañuela, Arjonilla y Arjona, seguidos de la de Porcuna. A continuación, la Virgen portada a hombros de sus anderos, que la hacía bailar, girar y subir a pulso acompasadamente con los aplausos o con las notas musicales de las bandas de cornetas y tambores que acompañaban a las distintas cofradías. Alrededor y detrás de la imagen, el pueblo emocionado cantándole y piropeando a la Madre de Dios. Como siempre, las muestras de devoción se multiplicaban en todas las partes del recorrido. Con gran concurrencia de público, en el Humilladero se vieron momentos emocionantes al ritmo del pique sonoro de las bandas de música, así como, a su paso por la casa de Pepe Cobo el Coro donde el Coro Romero de la Hermandad obsequió a la Patrona sus más bellas canciones. En Casa Eligo, su viuda e hija le regalaban manojos de claveles desde la azotea. Una lluvia de pétalos cubría el trono de la Virgen a su paso por la casa de la cofradía de Arjona, que se volvería a repetir unos metros más adelante desde otros balcones y terrazas. Mientras tanto, los cuerpos vencidos de los anderos, pero henchidos de fervor, sacaban fuerzas en los últimos metros del recorrido. Dos horas y media duró el desfile romero que terminó dentro de la ermita abarrotada de gente para despedir a su Virgen, entre las vibrantes marchas dedicadas por la Banda de Cornetas y Tambores “Virgen de las Angustias” y la algarabía fervorosa y emoción desorbitada de sus fieles y romeros.
Pero la jornada comenzaba en Porcuna a primeras horas del día con disparos de cohetes y alegre diana. Hacia las diez de la mañana, en el domicilio de los Hermanos Mayores, se daba la salida a los cientos de jinetes, carrozas, carruajes, charret y romeros que acompañaban a la Cofradía para recorrer el itinerario de costumbre por las calles del pueblo. Una hora más tarde la comitiva ponía rumbo a la aldea de Alharilla donde se ordenó para entrar en el Santuario de Ntra. Sra. de Alharilla. Pasada una hora del mediodía se ofició una solemne fiesta religiosa con la asistencia de autoridades, Hermanos Mayores, Junta de Gobierno de la Cofradía, cofrades y fieles.
Mientras tanto y hasta la hora de la procesión, el santuario era un hervidero de devoción y fervor. Los romeros y devotos cumplían con la visita obligada a la ermita para encontrarse con su Señora y expresarle su más profundo agradecimiento de estar delante de ella un año más, así como hacerle llegar sus peticiones y ruegos más sentidos.
En lo popular, la música y el polvo inundaron el ambiente, y los miles de romeros llegados desde todos los puntos de la geografía se distribuían entre los olivos o los diferentes lugares de la aldea. Mientras unos deambulaban, otros bailaban, cantaban y degustaban las ricas viandas y bebidas del lugar en casetas, chiringuitos, peñas, juntas de amigos y reuniones familiares.
De esta manera y sin incidentes relevantes, terminó la ansiada y esperada Romería que tendrá su continuación el último domingo de mayo con el Día de la Flores. Ese día las mujeres serán las anderas de la Patrona de Porcuna, que volverá a recorrer de nuevo en procesión la aldea de Alharilla.
3 comentarios
de madrid -
8 de la tarde, la iglesia hasta arriba de gente, la banda de cornetas donde el coro, un solo de corneta, el calor, la gente, veo a mi virgen entrado y rompo a llorar.
Tanto tiempo preparando esste día para que luego en unas horas todo vuelva a la normalidad, sigo llorando no se si son lágrimas de tristeza o de alegría, yo creo que es a la mitad, lloro por que hasta el año que viene no la veré más y estoy alegre porque otro año más ha pasado por mi vida y e podido verla salir y entrar.
demadrid -
Son las 4 de la tarde, entro a la iglesiay y ya comienzo a ver a mi virgen de alarilla volando por los aires, repique de campanas, una banda de cornetas, y todo el pueblo engalanao... miro al cileo y está mas despejao que nunca, ya a veo que guapa esta, mi cara se llena de lágrimas, unas lágrimas que año tras año salen solas y antes de lo previsto.....
Romero asombrao -